Singular Snacks

SINGULAR SNACKS

Crujiente de alga rebozada

Rectángulos de alga nori rebozadas por una cara y fritas. Son de sabor marino y picante, muy crujientes y sabrosas. Comer sólo una será complicado. Son ideales para romper sobre huevos fritos o como guarnición de tártaro de atún.

SINGULAR SNACKS

Un reto en nuestro catálogo es sin duda el de los Singular Snacks. Buscamos texturas, sabor, originalidad y gran variedad para intentar aportar un bocado diferente, único, conocido o, todo lo contrario, exótico. Aplicables como un simple snack pero también con recorrido en distintas creaciones en formato tapa o plato.

Más de 40 snacks repartidos en distintas categorías: frutos secos, sabores del mundo, mix, chips, crackers, chocolates y super healthy.

SINGULAR SNACKS

Son largos, son finos, son crujientes, son sabrosos y vuelan. Crackers alargados con sabor a tomate y albahaca; muy mediterráneos, ideales para acompañar un aperitivo, una cena informal o para picar entre capítulo y capítulo de tu serie favorita. Combínalos con tablas de queso, embutidos y ensaladas. Son tan resultones que no se quedarán abandonados en un rincón de la mesa. Ponlos a prueba.

SINGULAR SNACKS

En un principio resultan dulces, después picantes y muy sabrosos. Son discos muy finos y crujientes de arroz y pimienta cubiertos por una fina capa de polvos salados. El sabor a pimienta es claro y definido. Pueden ser el topping perfecto para una ensalada o simplemente el compañero ideal de una cerveza bien fría.

SINGULAR SNACKS
Chips

Un reto en nuestro catálogo es sin duda el de los Singular Snacks. Buscamos texturas, sabor, originalidad y gran variedad para intentar aportar un bocado diferente, único, conocido o, todo lo contrario, exótico. Aplicables como un simple snack pero también con recorrido en distintas creaciones en formato tapa o plato.

Más de 40 snacks repartidos en distintas categorías: frutos secos, sabores del mundo, mix, chips, crackers, chocolates y super healthy.

SINGULAR SNACKS

Discos finos, redondos y crujientes con sabor a queso. Los polvos que lo cubren son tan adictivos que dan ganas de chuparlos por completo antes de hincarles el diente. Eso
precisamente hace que no puedas parar de comerlos hasta que se acaben. Podrías usarlos de base para algún entrante divertido o simplemente comerlos sin parar.